OITNB 3: Sorry Not Sorry

Orange Is the New Black (OITNB) vuelve el viernes 12 de junio para Estados Unidos a través de Netflix. Y el sábado, 13 de junio, en España Canal + Series hará una maratón con todos los capítulos en versión original de esta tercera temporada, para luego subirla completa a YOMVI.

Basada en el libro autobiográfico de Piper Kerman, Orange Is the New Black: Crónica de mi año en una prisión federal de mujeres, esta serie creada por Jenji Kohan se estrenó en 2013 y arrasó entre el público y la crítica, tanto que a lo largo de estos dos años ha sido nominada y en muchas ocasiones premiada con Emmy, Golden Globes, Critics Choice Television Awards, Sindicato de Actores y otros tantos.

Pero el poder de OITNB es tal que antes de su estreno se había renovado para una segunda temporada y hace unos meses, cuando la mayor parte del público desconocíamos cualquier avance sobre lo que sucedería en la tercera temporada, saltó la noticia de la renovación para una cuarta. ¿Se puede pedir más?

Y eso sucedía, a pesar de la misteriosa ausencia de una de sus protagonistas, Laura Prepon en el papel de la carismática Alex Vause, en la mayoría de los episodios de la segunda entrega y el cambio radical que dio el tono de ésta con respecto a la anterior, ya que el espectador pasó de estar viendo una comedia ágil y ácida con momentos emotivos a un drama duro, lleno de tensión y centrado en otras historias que hasta entonces habían sido secundarias.

Pero de esto ya hace un tiempo, por eso vamos a recordar dónde nos quedamos y qué podemos esperar de los próximos capítulos según han ido conociéndose datos y trailers. Con lo cual, si no has visto las primeras temporadas de OITNB, para de leer en este punto porque te encontrarás más de un spoiler y ¡vete ahora mismo a verla!

Orange Is the New Black, cartel de la
tercera temporada

En la primera temporada, vimos a Piper Champan (Taylor Schilling) posponer su boda con Larry Bloom (Jason Biggs), su prometido, para entrar en una cárcel federal de mujeres y cumplir un año de condena por un delito que cometió hace más de una década. O, al menos, eso es lo que la Justicia considera oportuno tras las declaraciones de su antigua amante, Alex Vause (Laura Prepon), en las que delató a Piper para conseguir reducir su condena por tráfico de drogas.

El choque entre la vida acomodada y protegida que lleva con Larry, donde lo más duro es no saltarse una dieta autoimpuesta consistente en tomar solo zumo de limón durante una semana, y la brutal realidad de la existencia en la cárcel (descafeinada, porque es federal), privada de privilegios y alejada de sus seres queridos, da lugar a multitud de situaciones cómicas. Más todavía cuando descubre que Alex está cumpliendo su condena allí también, en la prisión de Litchfield (Nueva York).

                                                                                                           

Piper y Larry, momentos antes de que Litchfield entrase
en sus vidas

Y con una facilidad pasmosa, con ese escenario y esas premisas, además de rodeada de varios personajes pintorescos e interesantes, Piper Chapman pasa sus primeras semanas en la cárcel. Supera su torpeza, intenta manejar el negocio de jabones que tiene con su amiga del alma Polly Harper (Maria Dizzia), hace amigas y enemigos en Litchfield, y se debate entre no querer perder el amor de Larry y la fuerte atracción que sigue sintiendo por Alex, aunque la delatase. Es más, a través de flashbacks insertados con una naturalidad impresionante y sin extrañas transiciones, conocemos no solo el pasado de algunas de las reclusas sino que también vemos cómo se originó la relación entre Alex y Piper, lo que los fans han llamado Vausman, cómo se desarrolló y por qué terminó.

Laura Prepon y Taylor Schilling en un selfie
fuera del rodaje

Piper y Alex, separadas por algo más que una lámina de
contrachapado de los cubículos del baño

Así que, cuando termina esta primera temporada, conocemos a los distintos grupos étnicos en que se dividen las presas, hemos simpatizado más o menos con los miembros del personal de la prisión y nos hemos subido al Vausman ship, sí o sí. Ahora, también nos hemos mordido las uñas hasta los codos con el cliffhanger de la paliza brutal que Piper, siempre en defensa propia, le da a la pirada de Pennsatucky (Taryn Manning) mientras el prejuicioso y obsesivo señor Healy (Michael Harney) ignora sus obligaciones como funcionario de prisiones y permite que todo eso suceda.

En la segunda temporada, por fin sabemos qué sucedió. Piper no mató a Pennsatucky, aunque la dejó peor de lo que ya estaba, y como castigo a la reclusa Chapman la llevan a aislamiento indefinidamente. Bueno, no, de ahí va directa a una cárcel todavía más peligrosa, donde se mezclan hombres y mujeres. Aunque no es permanente, está allí para declarar en el juicio contra el señor de la droga para el que trabajaba Alex, de hecho, ella también está allí y convence a Piper para que niegue conocerlo como única salida para no convertirse en el objetivo de un hombre tan peligroso. Curiosamente, Alex sí lo inculpa y sale en libertad, mientras Chapman vuelve a Litchfield.

Y este primer episodio sigue conservando el tono de comedia, difícil, pero divertido.

De ahí en adelante, se introduce un nuevo personaje Vee Parker (Lorraine Toussaint), antigua jefa y “protectora” de Taystee (Danielle Brooks) y vieja enemiga de Red (Kate Mulgrew).

Suzanne la Ojos locos y Vee, que trata de convencernos
de lo sensible que es leyendo Bajo la misma estrella, pero
no cuela. Curioso detalle el incluir éste y otros títulos
de forma obvia en las escenas de la serie

Red ha perdido su puesto como cocinera a favor de las reclusas latinas y su poder se ha visto mermado, ya que al tratar de recuperarlo hiere accidentalmente a una de sus más devotas amigas. Con lo cual, solo le queda unirse al grupo de las ancianas y, por más que lucha, la oscura y manipuladora figura de Vee, apoyada por Suzanne la Ojos locos (Uzo Aduba) y Taystee, se va haciendo con el control de las presas y del contrabando de tabaco y drogas.

A parte de Red, Possey (Samira Wiley) es la más perjudicada por el dominio de Vee, quien utiliza el amor que sabe que ésta siente por su mejor amiga, Taystee, para enfrentarlas y se aprovecha de la obediencia de la Ojos locos para utilizarla como brazo ejecutor.

Nicky y la que es su figura materna en Litchfield, Red

También conocemos la verdadera historia de Lorna Morello (Yael Stone) y su prometido Christopher, con quien solo tomó café una vez y al que estuvo acosando durante meses hasta que las cosas se desmadraron realmente y él consiguió que la enviaran a la cárcel.

De la lesbiana más dicharachera y con más éxito de todo Litchfield, Nicky Nichols (Natasha Lyonne), no descubrimos mucho más. Sin embargo, sí lo hacemos de Gloria Mendoza (Selenis Leyva), líder de las latinas, y de Rosa Cisneros (Barbara Rosenbalt), la presa con cáncer terminal. ¡Genial cuando atropella a una Vee huida al final de la temporada! Así nos aseguraba que ese personaje tan venenoso no volvería a estar en la tercera.

El amor entre el guardia John Bennett (Matt McGorry) y la presa Daya (Dascha Polanco) continúa floreciendo, como su embarazo, a pesar de las adversidades y de los extraños sentimientos de un casi ausente Pornstacho (Pablo Schreiber).

Bennett y Dayanara, un amor prohibido e ilegal

Y tras una tensa lucha de poder y el descubrimiento de la malversación de fondos que hace Natalie Figueroa (Alysia Reiner), Joe Caputo (Nick Sandow) consigue el puesto de subdirector de Litchfield.

Caputo y Healy, a cual más colgao

Pero ¿qué es de Piper, mientras tanto? Poca cosa, su personaje pasa a un segundo plano cuando desaparece el de Alex Vause, puesto que no se puede desarrollar el conflicto —amor, traiciones, venganzas—; y la relación de Pips con Larry tampoco tiene demasiado margen, estando él fuera. De hecho, para que el personaje de Larry pueda tener algo de vida, cae en brazos de Polly, que acaba de dar a luz y su marido se ha ido de viaje recreativo.

Así que Piper, en realidad, vuelve a brillar cuando Laura Prepon interviene en el capítulo —lo hace brevemente en tres o cuatro— y entonces aparece en escena Alex.

Sí, lo sabes, no pongas esa cara...

Lo último que sabemos sobre ellas es que el personaje de Taylor Schilling hace una llamada para delatar a Alex por violar la condicional y, en los trailers de la tercera, la vemos regresar a Litchfield y preguntarle a Chapman por qué está otra vez encerrada.

¿Qué más sabemos o esperamos en los próximos capítulos? Se sabe, anunciado con bombo y platillo, que hay presa nueva en la cárcel: Stella Carlin. Ruby Rose, la actriz que la interpreta, ha hecho declaraciones en las que se dejaba entrever que tanto Alex como Piper estarán interesadas en ser más que amigas de Stella. Con lo cual, parece que el triángulo amoroso está asegurado. ¿Triángulo? ¿Círculo?

Stella, dicen, tendrá un sentido del humor algo cáustico

En cualquier caso, personalmente, lo que espero es volver a reírme como lo hice durante los primeros capítulos. La segunda temporada fue más densa de lo esperado y me encontró desprevenida. Aunque las interpretaciones, el guión y, en general, el poder de las historias eran igual de buenos que en la temporada anterior, si no más, buscaba una comedia crítica, no un drama carcelario reivindicativo.

¿Estáis preparados?

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